Al menos siete integrantes de una familia murieron hoy tras el incendio declarado en una comunidad residencial de Filipinas, informaron las autoridades locales.
"Siete personas de la misma familia fallecieron tras la propagación de un incendio por alrededor de unas cuarenta casas, ubicadas en el distrito de Taytay, a unos 25 kilómetros de Manila, la capital de Filipinas", reportó la cadena filipina de radio y tv GMA Network, con sede en la comuna de Diliman, Quezón City, el centro urbano más poblado del país asiático.
El incendio comenzó cerca de las 21.43 (10:43 hora argentina) y, según el departamento de bomberos de Taytay, las víctimas fatales intentaron salir de sus casas, procurando refugios, "pero les fue imposible al encontrarse atrapados al final de la calle". consignó la agencia de noticias Europa Press.
Taytay es un municipio perteneciente a la provincia insular de Palawan en la región tagala de Mimaropa, con una población de unos 80.000 habitantes.
Por su parte, un portavoz del cuerpo de bomberos, Gary Raymon Cantillon, confirmó oficialmente siete fallecidos y un herido y apuntó a "un ventilador eléctrico, sobrecalentado, como origen del desenlace".
Los cuerpos fueron encontrados en la cocina y el salón y entre ellos se encontraba un niño de tan solo dos años. La víctima de mayor edad es de unos 60 años.
El fuerte incendio dejó a más de sesenta familias sin casa y las autoridades locales, junto con la Oficina de Protección contra Incendios, están investigando el origen del mismo.
El siniestro se propagó rápidamente dentro de un barrio densamente poblado, integrado mayoritariamente por casas de confección antigua, envolviendo más de cuarenta de ellas, antes de que el fuego pudiera ser declarado bajo control, más de una hora después.
Poco después, se declaró un segundo incendio en el barrio de Dolores, que solo pudo ser sofocado después de dos horas de trabajo.
Ese nuevo fuego se extendió rápidamente debido a que las viviendas estaban construidas con materiales inflamables. Aunque en ese caso no existieron víctimas mortales, pero si unas 90 familias afectadas. (Télam)