El uniformado encontró la forma de cuidar a la gente sin que sientan la obligación, explicó.
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El desopilante momento ocurrió en el Parque de la Colectividades, de Rosario, donde un trabajador municipal comenzó a controlar a los transeúntes que no tenían barbijo o no respetaban la distancia para prevenir el riesgo de contagio de coronavirus.
Los controles en la vía pública con la presencia de más agentes de la Guardia Urbana Municipal (GUM) es en parques y plazas.
Los rosarinos recibieron con risas las órdenes del uniformado. “Atención a todos los ciudadanos. Recuerden que el barbijo cubre nariz, boca y mentón. Por suerte está todo dentro de la misma cara y usar un barbijo caído es como llevar el casco en el codo, no sirve para nada”, advirtió.
“Caballero, ¿se le cayó el barbijo o la nariz se le subió?”, le preguntó a un hombre irónicamente.
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