Fue el hijo quien al escuchar el disparo se acercó al lugar. Llevó al socio de su padre al hospital y al regresar se había quitado la vida. Alertó a la policía.
Crónica
Un hombre baleó a su compañero de trabajo y amigo, lo creyó muerto y se mató. Todo sucedió este viernes a las 7 de la mañana cuando la Policía fue alertada sobre una persona herida de arma de fuego en el barrio Las Trincheras de la localidad de Icaño en Santiago de Estero.
Al llegar, los efectivos se entrevistaron con Mario Alberto Flamenco, de 41 años, quien relató que momentos antes oyó un disparo de arma de fuego a unos 300 metros de su casa, sobre un camino vecinal y fue a ver qué ocurría.
A unos 300 metros vio a su padre Marcelo Flamenco, de 62 años, en completo estado de nerviosismo y con una escopeta calibre 16 en sus manos. A un lado del camino César Díaz, a quien le dicían"Yiyi", quien era compañero de trabajo y socio de su papá, tendido en el suelo y con heridas de arma de fuego.
Una ambulancia trasladó a Díaz hacia el hospital de de Colonia Dora, desde donde debido a la gravedad de sus heridas, fue derivado al hospital Regional de ciudad de Santiago del Estero.
Agregó que su padre se había matado con el mismo arma de fuego en una zona montuosa, a unos 500 metros del lugar sospechan que al creer que su amigo había muerto. Los policías acudieron al sitio señalado y, efectivamente, hallaron el cadáver de Flamenco.
Flamenco y Díaz eran muy amigos, además de que trabajaban juntos. Los vecinos no se explican qué pasó. El fiscal se presentó en el lugar para supervisar las pericias.